Varios supuestos

Llega el mes de diciembre y se acaba el 2021, fin de año clave especialmente para las pensiones, de cara a las nuevas jubilaciones que llegan en 2022. Más de medio millón de afiliados en la Seguridad Social tienen más de 60 años y cuentan con más de 40 años de cotización, por lo que llegados a la edad mínima de jubilación podrían retirarse de su etapa laboral contando con una pensión mermada por los coeficientes reductores establecidos por el Gobierno. Es más, 125.000 trabajadores han superado ese umbral de los 63 años, por lo que podrían jubilarse ya y vivir con la cuantía mensual que le corresponde en cada caso personal. Pero se avecinan cambios y nuevas situaciones que provocarán que jubilarse, cuando entren en vigor las modificaciones anunciadas por el ministro del ramo José Luis Escrivá, será diferente a conforme se hace en la actualidad. Habrá, por lo tanto, un periodo del tiempo en el que se pueda casi elegir cuándo jubilarse, si hacerlo dentro del plan actual o ya con las nuevas jubilaciones que llegarán en 2022. La clave está en los coeficientes reductores y su temporalidad.

Desde que el ministro Escrivá alcanzara el cargo estatal ha quedado más que claro que el caballo de batalla en las nuevas pensiones y jubilaciones es, por parte del Gobierno, intentar que los trabajadores no se retiren de forma prematura, aprovechando la mínima oportunidad que concede el sistema. Con una larga carrera de cotización se podría jubilar a los 63 años, pero al debilitado sistema de pensiones esta práctica sólo hace que mermarle más y más. La opción del Gobierno fue presentar un nuevo marco de pensiones en el que jubilarse de forma anticipada no saldría tan beneficioso, ya que de hacerlo se vería muy reducida la cuantía mensual que ingresa la Seguridad Social en la cuenta bancaria.

Atendiendo a los datos que facilitaba el Gobierno en el mes de octubre, más del 75 % de los jubilados anticipados de forma voluntaria lo hacen justo a los 63 años, que es la edad mínima. Esto quiere decir que una gran mayoría decide dejar de trabajar conforme lo permite el sistema. Sólo un 0,47% ‘alarga’ su edad de jubilación a los 65 años legales.

Ante estos datos y la lectura pertinente del calendario. ¿Qué sale más rentable: jubilarse a finales de 2021 o esperarse a 2022? El Gobierno batalla por cerrar el acuerdo de las pensiones, que tengan ya una fecha clara de entrada en vigor y que el sistema empiece a constituirse de cara, en algunos casos, a su práctica implantación allá por el año 2033. La clave de la posible decisión de un futuro jubilado está en cuánta pensión va a cobrar, cuánto le va a restar la Seguridad Social por jubilarse de forma anticipada, antes de alcanzar la edad ordinaria.

El plan actual permite que con una cotización de larga carrera un trabajador pueda jubilarse a los 63 años. A partir de cumplir estos requisitos se aplican una serie de coeficientes reductores que se van reduciendo cada tres meses y que se ajustan directamente en la base reguladora, por lo que se podría decir que la resta se realiza en una parte del cómputo completo que conforma la cuantía de la pensión.

Cuando entren en vigor las nuevas jubilaciones el plan cambia casi por completo. El Gobierno no quiere que los trabajadores se retiren de forma anticipada, por lo que hacerlo saldrá más ‘ caro’. Los nuevos coeficientes reductores se aplicarán de forma mensual y no cada tres meses de antelación, así como que su asignación será directamente sobre la cuantía total a recibir y no sobre una parte del cálculo. Esto implicará que el total de la pensión se vea mermado de forma más directa.

Para luchar contra esa jubilación justo al cumplir la edad mínima, la Seguridad Social ha establecido que los coeficientes reductores más altos se apliquen justo en ese primer momento que la ley permite jubilarse. No va a variar el que se pueda jubilar al cumplir los términos, pero sí se ingresará una cuantía muy inferior a la que se percibe actualmente en una situación idéntica. Las pensiones que más se verán afectadas con las más altas, que podrían ver reducida su cuantía hasta un 2,6 %, mientras que atendiendo a las pensiones medias y bajas incluso podría darse un incremento de la cuantía a ingresar comparando el plan actual y el futuro.

La pagina web de la Seguridad Social dispone de un simulador de la pensión, pero reiteradamente avisan a los contribuyentes y futuros jubilados de que la cuantía exacta se calcula de forma personal y se da a conocer tras la solicitud que debe presentar el interesado ante la administración para recibir esta pensión pública.

Fuente: Las Provincias